HIPSTERZ
CASEY & LENA: NI TANTA MÚSICA NI TANTO AMOR
Casey tenía una rutina muy definida: después del trabajo, salía a su casa a ver televisión con cable pirata, comer Pop Tarts, ver algo de porno alemán y dormir en el basurero que estaba encima de su cama.
No siempre fue así; alguna vez Casey tuvo una vida , pero eso fue en una época extraña y oscura: la Universidad, pero esa ahora parecía otra vida, y otro Casey.
En ocasiones, Lena intentaba sacarlo de su letargo social, pero siempre era recibida su propuesta con una negativa.
—¿Planes para hoy?—Lena preguntó a la hora de cerrar la tienda, ese viernes—¿O vas con tu cita contigo mismo de nuevo?
—Creo que fue Woody Allen quién dijo que: "Al menos es el único sexo con alguien que realmente quieres".
—Buen punto, pero el detalle es que tu te odias.
—Puedo soportarme a ratos, en especial si hablo poco.
Casey se despidió y partió hacia su apartamento en el lado sur de la ciudad, con Lena mirando a su espalda con una mezcla de lastima patética y lastima melancólica; sea cuál sea la proporción, Casey daba pena ajena.
El joven, ya en su hogar, encendió su ordenador: una vieja computadora que adquirió pieza por pieza de una tienda de electrónicos siria y revisó como todas las noches su correo: nada mas que rechazos de ofertas de empleo (duele cuándo McDonalds no te quiere) y remedios para la disfunción eréctil.
—Bueno...ya cumplí con lo profesional...ahora a divertirse...
Casey abrió su carpeta de "favoritos" y estaba listo para comenzar a disfrutar del festín de erotismo virtual de ".de", pero alguien abrió su puerta en medio del "ahorcamiento de la salchicha.
—Hola Casey, solo quería...¿¡Qué es esto!
—¡Lena! ¿Al menos podrías tocar?—el chico pidió mientras se subía los pantalones
—Eso intenté pero tu maldita puerta se abrió...y...¿Qué es esto?
—Puedo explicarlo...
—Tal vez si, pero eso no me quita el asco: tu apartamento es una pocilga.
—Si, lo se, pero...espera, ¿mi apartamento?
—Mi tía Conchita puede limpiar todo esto a cambio de un dolar la hora y un taco del mini-mart.
—¿No te sorprende que haya estado...en un privado conmigo mismo?
—¿Que tiene que sorprenderme? Con tu barba mal rasurada y tu gusto en franelas y suéteres de escuelas a las que nunca fuiste pareces un leñador pedófilo, ¿una jaladita? ¡eso es lo de menos!
—Como sea, ¿que haces aquí?
—Vine por ti: it's showtime baby
—¿Y dices que yo parezco el pedófilo?
—Bien, bien, mira: te llevaré de jerga esta noche.
—¿Cuál es el motivo? ¿mi tío murió y me lego su guitarra de Carlos Santana?
—Olvidalo, ya le puse el ojo a esa guitarra, pero no es eso, ¿necesitas una excusa para celebrar?
—¿Quién te crees? ¿Una "Manic Pixie Dream Girl"?
—Casey, juro que tus insultos cada día están peor...
—No, no, no es insulto, pero ya sabes: es esa chica extrovertida, vivida y sexy con cierto aire de inocencia infantil que ayuda al protagonista masculino serio y depresivo a obtener una visión mas optimista de la vida y de sus aventuras.
—¿Crees que soy sexy?
—Eres bisexual: no es que te crea sexy, es solo una ley de la vida.
—Bueno, dejemos esas etiquetas de lado, el caso es que te llevaré a clubear hoy.
—¿"Clubear"? ¿eso viene del diccionario de David Ghetta?
A pesar del desanimo de Casey, fue mas la voluntad de Lena y lo llevó casi arrastrando de la mano al centro de la ciudad. Casey casi queda ciego ante las luces de los bares y los clubes que pegaban con mayor intensidad que el elusivo Sol de esa lluviosa ciudad.
—No te me pongas pesado Casey, si quieres solo nos tomamos unas cervezas y ya, pero el caso es que salgas un poco—comentaba mientras ambos entraban a uno de esos bares.
—¿Quién eres? ¿mi madre?
—No...según tu soy una Manic...Dream...algo.
Ambos se acercaron a la barra y ordenaron unas cervezas; había música dance tan insípida como solo los europeos pueden crear, parejas bailando, tríos bailando, orgías ambulantes bailando...bueno, eso último no, pero en la multitud no había "eres mío" o "eres mía", solo almas en trance por el ritmo y el alcohol dejándose llevar por el espíritu de la fiesta.
—¿Y dime, que tan cierto es lo que me dijo tú tio?—Lena preguntó, con botella en mano y a espaldas de la barra, ambos mirando a los bailarines siguiendo el ritmo con un pequeño movimiento en sus pies confundible con un tic nervioso
—Es una completa mentira: a pesar de lo que te pueda decir y mi madre, nunca me oriné en frente de la entrega de diplomas de la primaria.
—No...no era eso Casey, quería decir sobre que alguna vez fuiste un animal nocturno.
—Oh...bueno...lo de la orina es completamente mentira, ¿eh?
—Estoy segura que si...
—Pero de vuelta el tema en cuestión...pues si, alguna vez tuve una vida fuera del trabajo, ¿es demasiado sorprendente acaso?
—Un poco: no te conozco desde hace tanto después de todo, pero eres muy reservado y algo estirado, me cuesta imaginarte de otro modo.
—¿Dices "estirado" como "aburrido" o como...?
—Dejalo ir Casey: te vi masturbándote, no es nada del otro mundo.
—Solo hay un modo de emparejar la situación, ¿no es así?
—¿No sugieres verme a mi de ese modo verdad?
—Depende, ¿eso es un "si" o un "no"?
—Un "no" con n de "necio".
Entonces, una mujer rubia y de gruesos labios rubí metida en una diminuta falda de mezclilla y un top rojo fuego pasó frente a ellos dos.
—¡Mía!—Casey y Lena pronunciaron tras verla
—No, bromeo Casey—Lena comentó antes de tomar un poco mas de su cerveza—, ademas, te guiñó a ti.
—No lo creo...¿de verás?
—Eso o quería matar una mosca con sus pestañotas.
—Mira, no es como si no quisiera...pero no lo se...simplemente no lo se.
—¿Que no sabes? Podrías de hecho tener suerte con algo que no sea tu propia mano, ¿que le piensas tanto?
Casey revivió el motivo que lo había llevado a esa isla lejos de todo donde se había instalado desde el fin de su educación universitaria.
—¿Pensando en la ex?—Lena preguntó con burla al observar la perdición en el rostro de su compañero
—Si—contestó de tajo, a punto de un tono de furia apenas pudiendo ser contenida.
—Oh...lo siento mucho de verdad.
—Esta bien, tu no sabías...
—¿Y que pasó? ¿No le gustan los chicos buenos con geniales "semi afros" como tu?
—No tienes que halagarme Lena, de verdad estoy bien, pero ya sabes, algunas cosas son difíciles de recordar...o mas bien, demasiado fáciles de recordar.
—¿Y...hace cuánto fue?
—Pronto se cumplirá un año...
—No puedes estar así por siempre.
—Se bien que no, pero puedo intentarlo, ¿no?
—No dejes que una perra gobierne tu vida...a menos que sea yo, claro esta, ¡pero debes librarte de ese peso! ¿qué? No es como si fuera a aparecer para recodarte ese dolor.
—De hecho...
Casey señaló a la entrada del bar un grupo de chicas de buen ver y ropas caras; una de ellas, de cabellos castaños claros y ojos avellana hizo acelerar el corazón del chico, mas no por amor, sino por miedo y nerviosismo.
—¿No me digas?—Lena preguntó, comprendiendo al instante el lenguaje corporal de Casey—¿ella es...?
—Evangeline French...dolor, tienes nombre y forma de mujer, y esos son...
—No exageres Casey...
—Vamonos de aquí—él exigió antes de dar el último trago a su bebida.
—¡Acabamos de llegar!
—Lo se, pero no me gusta esto: vamonos de aquí.
—Oye, oye Casey, entiendo que aún te lastime verla, pero si te vas dejarás que te domine.
—¿Y qué? ¡Ni siquiera quería venir yo!
—Casey...yo solo quería ayudarte un poco—Lena murmuró con grietas en su corazón.
—Y lo hiciste MUY bien...
Lena no quería dejar las cosas de ese modo: Casey estaba mas herido que antes, y todo por una presencia femenina indeseada...a menos que...
—¿Qué haces?—Casey preguntó al sentir las manos de Lena en su rostro
—¡Cállate y besame!
Y con mas voluntad que pasión, ambos unieron sus labios en el beso mas forzado, falso e inverosímil desde que se inventaron las relaciones públicas, con un solo fin.
—¡Oh, Casey!—gritaba Lena del modo mas disimuladamente escandaloso posible—¡eres una fiera!
—¡Pero si tu empezaste!—respondió
—¡Trato de ayudarte idiota!—Lena susurró a su oído
—Casey...hace mucho que no te veía—Evangeline comentó al ver estorbada su marcha por la "apasionada" pareja—, y veo que estas bien acompañado.
—Si, si, ella es...em...Evangeline, ella es Lena, es mi...
—Soy su novia—Lena interrumpió.
—¿Novia eh? ¿Desde cuándo salen?
—Unos...¿que dirías cielo, unos diez, once meses? Ya casi un año.
—Fascinante, no había oído mucho de ti, es bueno saber que estas bien, y en tan buenas manos.
—Si, no tienes ni idea—fue lo único que un confundido Casey pudo contestar.
—Bueno...no los detengo: mucho gusto Casey...mucho gusto Lena.
Finalmente, Casey salió del lado de su compañera, furioso, con los ojos inyectados de sangre y raspando su propia dentadura contra si misma.
—¡Casey! ¡Casey! ¿Pasa algo?—Lena repetía tratando de mantener el paso apresurado de su amigo
—¿Por qué hiciste eso?—él confrontó a su compañera
—¿Qué cosa?
—Humillarme frente a ella.
—¿Humillarte? Solo quería que viera que ya la superaste.
—Si, ¡pero no la he superado!
—Casey...lo siento de verdad, pero quería que viera que no te dejas manejar por nadie mas.
—¿Ah si? Dime entonces señorita "Pixie Girl", ¿por qué vine aquí esta noche?
—Porque...porque yo...básicamente yo te obligué a venir...
—¿Un poco contradictorio, no es así?
—Pues...supongo que si...
Casey pidió un taxi, le dio a Lena un poco para que ella pudiera pagar su camino a casa, y se marchó, y no se vieron más hasta el lunes siguiente...
—Buenos días Casey—Lena lo saludó al verlo entrar, con una buena dosis de vergüenza en su voz.
—Hola Lena...
—Oye, ¿estás bien?
—Si, lo estoy...bueno, no de todo, pero al menos no estoy tan mal.
—Bueno...algo es algo...
—Todo esta bien Lena, perdoname a mi por alterarme y ponerme como...bueno, como Casey.
—No, creo que es fácil criticar algo si no lo ves desde la perspectiva correcta y...no se, creo que te mereces algo mas que aun llorar por una chica que se fue.
—Lo se.
—¿Entonces?
—La vida no es una comedia romántica rara y loca Lena; la chica animada e ingeniosa no puede en una noche acabar con la depresión del chico dolido y melancólico...OJALA fuera asi, pero...no lo es.
—Creo que para muchos se necesita mas que unas horas de borrachera.
—Y bueno Lena...de todos modos, gracias.
—Cuándo quieras Casey, y lo prometo: la próxima vez que quiera ayudarte en algo, será cuándo quieras...
—¿Si? Bueno, ¿que tal este viernes?
—¿que cosa? ¿este viernes?
—Una noche no será lo suficiente, pero quizás muchas noches puedan ayudar de algo...además, tengo la mano medio entumida.
—Eso es...asqueroso Casey.
—Lo se, lo siento...
—Pero esta bien...
Y ambos hicieron las pases con un pequeño abrazo; claro, hasta que estuviera segura que se limpió bien las manos, Lena intentó evitar la mano derecha de Casey, y con sonrisas discretas en sus rostros, se fueron a organizar la mercancía antes de abrir la tienda.
—Oye Lena, una cosa—Casey llamó la atención de la joven—, tengo una pequeña duda que me queda.
—¿Qué pasa?
—Nos conocemos desde hace algún tiempo, ya pude ver como era una salida contigo y eso, y sin embargo...no te conozco ningún amigo, aparte de mi, claro.
—Bueno Casey, yo también espero que me consideres una amiga y no solo una compañera de trabajo fastidiosa..,
—¿Y...?—intrigó Casey, todavía esperando su respuesta
—Y...bueno, no eres el centro del universo. Muchos...tenemos problemas...creo que eso me vuelve un poco hipócrita, ¿con que poder me siento para ayudar a otros si no puedo ni poner mi vida en orden?
—No puedo siquiera fingir que los podré resolver en una noche como tu intentaste pero...aquí estoy.
—Lo se Casey...lo se.
FIN
NOTA DEL AUTOR: Este es el segundo corto de la posible serie "Hipsterz" que sería el reemplazo de otoño para Josh y Hopewell.
Aun estoy tratando de hallar el tono indicado para la serie y las personalidades correctas para hacer de los personajes lo suficientemente distinguibles de esas dos series, y como podrán ver, toma esas ideas de las comedias románticas que solo se necesita amor y un momento de locuras para resolver todo dolor y...bueno, las expongo.
Es un corto mas dramático, no se que piensen, espero que les haya agradado, y espero que me den sus opiniones para ver que puedo hacer con este proyecto.
Nos vemos
PD: La "Manic Pixie Dream Girl" es un arquetipo de personaje en la ficción; búsquenlo en google para que vean de que trata y entenderán mucho de esta parodia/deconstrucción