Nuestro deseo
Deberíamos compartir nuestros alientos,
a solas, a oscuras, sólo nuestros cuerpos;
sin caprichos, sin distracciones,
sin malos pensamientos y sin temores.
Pero amor, hoy barreras nos separan,
que son difíciles de derrumbar,
y aunque aguantemos el mal tiempo,
es difícil de controlar.
Dejemos que fluya,
incontrolable se ha vuelto,
empecemos a jugar,
porque amor, desearnos en un defecto.
23 de septiembre de 2015.